ADECES, Asociación Pro Derechos Civiles, Económicos y Sociales, ante las noticias aparecidas en el día de hoy en los medios de comunicación sobre las nuevas tarifas fijo móvil que Telefónica pondrá en vigor a partir del 1 de enero de 2008 lamenta la tergiversación de la que ha hecho gala Telefónica a la hora de suministrar esta información.
Según se puede leer en diversos medios de comunicación, el operador anuncia un incremento del establecimiento de llamada del 25% y una reducción del precio minuto que oscila entre el 8 y el 18%.
Sin embargo, Telefónica oculta que los efectos de ampliación del horario normal con carácter general el sábado de 8 a 14 horas (antes sólo para Orange) y la extensión diaria del mismo a Vodafone de 8 a 22 horas (antes sólo hasta las 20 horas), representa una reducción del número de horas semanales de horario reducido próxima al 10%.
El primer efecto de esta ampliación del horario normal es que las llamadas realizadas en sábado entre 8 y 14 horas a Movistar y Vodafone, la gran mayoría, tienen un precio de 15, 5 céntimos de euro frente a los 10,90 que rigen en la actualidad, es decir, un 42,20% más caras. Lo mismo ocurrirá con todas las llamadas efectuadas a Vodafone entre las 20 y las 22 horas de lunes a viernes.
Tomando en consideración el establecimiento de llamada y los precios minuto que ahora anuncia Telefónica los usuarios pagarán más caras sus llamadas desde Telefónica a móviles en horario normal: un 3% si se llama a Yoigo, el menor número de llamadas; 22% si se llamada a Movistar y 17% y 14%, según se llame a Vodafone u Orange.
En el caso del horario reducido (sin contar con el efecto de ampliación del horario normal) las llamadas a Vodafone y Movistar se incrementan el 16% y las llamadas a Orange el 26%, ya que al 25% de subida del establecimiento hay que añadir un 1% de encarecimiento del precio por minuto.
Con estas primeras estimaciones practicadas por ADECES, Telefónica no puede hablar de reducciones del precio minuto entre el 8% y el 18%, sino de encarecimiento del mismo, puesto que a los nuevos precios minuto hay que sumar los efectos del establecimiento de llamada.