Por el Dr. Isidoro Bruna Catalán, miembro de la Junta Directiva de la SEF
Probablemente en la mente de ninguno de los miembros que el 4 de agosto de 1953 constituyeron la Sociedad Española para el Estudio de la Esterilidad (SEEE), antecesora de lo que actualmente es la Sociedad Española de Fertilidad (SEF), estaba la relevancia que la Medicina de la Reproducción iba a tener en el último cuarto del siglo XX y durante el siglo XXI.
La SEEE se fundó dos meses después de la celebración del Primer Congreso de la Federación Internacional de Sociedades de Fertilidad (IFFS), a partir del interés de algunos eminentes ginecólogos españoles de la época (Prof. José Botella LLusiá, Prof. Eduardo Vilar, Prof. José Antonio Clavero Núñez…) por la endocrinología ginecológica y con el afán de encontrar alternativas terapéuticas a lo que entonces se denominaba “esterilidad”.
En octubre de 1953, se celebró el Primer Congreso de la SEEE en Madrid, girando su tema central sobre “La importancia de la tuberculosis genital en la esterilidad”.
Pero el nacimiento de Louise Brown el 25 de julio de 1978 en el Bourn Hall Clinic de Londres cambió el curso de la historia, representando unos de los hitos más relevantes de la historia de la ciencia.
Louise Brown fue el fruto del talento y la perseverancia de “nuestro buen padre” Robert Edwards (Premio Nobel de Medicina en el año 2010) y de Patrick Steptoe. Necesitaron de 101 intentos fallidos para lograr que al fin un embrión humano implantará en el endometrio de una mujer. A este primer éxito siguieron muchos otros, entre ellos los de los grupos australianos de Lopata, Wood y Trounson, quienes consiguieron en 1980 el nacimiento de la primera niña australiana tras FIV y dos años más tarde el primer embarazo tras la transferencia de un embrión criopreservado.
El éxito de la FIV llegó a nuestro país el 12 de julio de 1984 con el nacimiento por cesárea de Victoria Anna, primer bebé español conseguido mediante Fecundación in vitro. El exitoso acontecimiento se logró gracias al equipo del Dr. Pedro N. Barri en el Instituto Dexeus.
La realidad actual es que la reproducción humana asistida representa un conjunto de recursos terapéuticos ampliamente estandarizados y muy difundidos en los países desarrollados. La aplicación de estas técnicas y tratamientos ha potenciado el crecimiento exponencial de una disciplina, la Medicina de la Reproducción, que representa hoy un ámbito complejo, dinámico, e interrelacionado con multitud de áreas del conocimiento pertenecientes, entre otras, a las ciencias biomédicas básicas y aplicadas, las ciencias del comportamiento, la bioética y el derecho biosanitario.
Y cada vez más españoles recurren a los tratamientos de reproducción asistida para lograr ser padres. Así, el último Registro Nacional SEF-Ministerio de Sanidad sobre Actividad de Técnicas de Reproducción Asistida (TRA) señala que en España se realizaron durante el año 2014, 156.865 tratamientos completos de TRA (116.688 de FIV-ICSI y 40.177 de Inseminación Artificial).
Estos datos han convertido a España en el primer país de Europa con mayor actividad en reproducción asistida y el tercero en el mundo. Por otro lado, las características de la legislación española y la calidad y número de los centros españoles han hecho de nuestro país también el líder europeo en tratamientos con ovodonación.
Es también menester señalar que parejo a esta actividad, la calidad de la labor investigadora española en Medicina de la Reproducción es ampliamente reconocida a nivel internacional, siendo creciente el número de Centros que publican sus estudios en las revistas de mayor impacto científico.
Han pasado 64 años desde la creación de nuestra sociedad. La SEF actual es, según sus estatutos, una sociedad científica entre cuyos fines figuran los de promover y fomentar los estudios sobre fertilidad humana, constituirse como interlocutor y asesor de las Administraciones Públicas en todo lo referente a la reproducción humana, así como, recoger, ampliar y divulgar conocimientos en relación con los problemas científicos, sociales y demográficos de la reproducción.
Gracias al empuje de la SEF y de todos los profesionales que la integran (ginecólogos, embriólogos, andrólogos, psicólogos, profesionales de la enfermería…), no solo se ha incrementado exponencialmente la eficacia, eficiencia y seguridad de los TRA, sino que se ha ido reduciendo de forma progresiva el porcentaje de embarazos múltiples derivados de los tratamientos.
No podemos acabar esta pequeña reseña sin incidir en los valores sociales que los profesionales de la medicina de la reproducción, aglutinados en la SEF, han ayudado a promover. No se trata solo de que la SEF haya velado por la ortodoxia científica y jurídica de los TRA. Ni de que nuestros tratamientos sean el origen del 7,91% de los niños que nacen en España… La reproducción asistida, junto al desarrollo de la genética molecular, ha transformado el concepto de “salud reproductiva” al dirigirse a prevenir las enfermedades genéticas en la descendencia de algunas parejas, gracias al diagnóstico genético preimplantacional, y se ha convertido en una herramienta fundamental en el cambio de los valores sociales, al posibilitar el nacimiento de niños de una manera menos discriminada, consolidando nuevos modelos de familia.
Si… La SEF ya tiene 64 años de historia, habiendo pasado por ella muchas juntas directivas desde su primer congreso en Madrid. En Mayo de 2018 en Madrid, la SEF tendrá de nuevo el orgullo de celebrar su 32º congreso nacional…