ADECES (Asociación Pro Derechos Civiles Económicos y Sociales) solicitará al nuevo legislativo surgido de las elecciones del 9 de marzo que aborde sin demora el cambio del régimen común del matrimonio, estableciendo la separación de bienes como régimen común en defecto de pacto entre las partes.
La asociación considera que este cambio reforzará el principio de igualdad jurídica de los cónyuges y permitirá la adecuación a la realidad social.
Hasta ahora el régimen de separación de bienes rige en Cataluña, Aragón, Islas Baleares, Navarra y algunas zonas del País Vasco, a estos territorios se ha unido recientemente la Comunidad Valenciana.
El régimen de separación de bienes permite la independencia patrimonial y la libertad de disposición de cada cónyuge sobre sus propios bienes, a la vez que circunscribe la responsabilidad ante terceros al patrimonio del cónyuge responsable sin comprometer, en consecuencia, el patrimonio del otro y la estabilidad económica de la familia.
Según ADECES, el régimen de separación de bienes es especialmente apropiado en los casos de familias recompuestas o múltiples, es decir, aquellas surgidas con motivo de nuevas nupcias de personas viudas o divorciadas con hijos, o también solteros con hijos extramatrimoniales que se casan por primera vez.
En todos estos casos la separación de bienes evita la confusión de patrimonios y por tanto salvaguarda los intereses de los hijos anteriores y los del nuevo matrimonio. Según el INE, en 2006 se celebraron 203.000 matrimonios, de ellos en 20.000 concurría una persona divorciada y en 2.000 lo hacía un viudo.
Otras cifras del INE refuerzan esta nueva realidad social a la que ADECES hace referencia: la tasa de divorcios por mil habitantes ha pasado del 2,33 de 1998 al 3,26 en 2006, hasta alcanzar ese año los 127.000, lo que representa un incremento del 74,27% sobre 1998.
Por último baste decir que en el año 2005 por cada 100 matrimonios se registraron un 27% de causas de separación y un 45% de asuntos de divorcios.